En el año 1871 publicaba Carroll la segunda parte de las aventuras de Alicia, A través del espejo. Curiosamente, la génesis de esta obra guarda un sorprendente paralelismo con primera parte de las aventuras de Alicia. Por aquel entonces Carroll conocía a otra niña llamada Alice Raikes.
Se encontraba esta segunda Alicia jugando en el jardín de su casa cuando Carroll la llamó desde el interior. Estaba en un salón lleno de elegantes muebles con un gran espejo al fondo. Carroll situó a la niña delante del espejo y dándole una naranja le dijo:
—Primero quiero que me digas en qué mano tienes la naranja.
—En la derecha —contestó Alicia.
—Ahora —dijo Carroll— fíjate en el espejo y dime en qué mano tiene la naranja la niña que ves en él.
—En la izquierda —dijo Alicia.
—¿Y cómo se explica eso? —le preguntó Carroll.
La niña se quedó dudando, pero al fin dijo:
—Si yo estuviera al otro lado del espejo, ¿no es cierto que la naranja seguiría estando en mi mano derecha?
—¡Bravo, mi pequeña Alicia! —exclamó Carroll—. ¡Es la mejor respuesta que he recibido hasta el momento!
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Agradecimientos: BAPHOMETTT (por enviarme este texto)
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10 comentarios:
Madre mía!! La inocencia y lógica pura de la niñez.
Me ha encantado esa conversación.
¡Qué lista era Alicia!
Tengo unos amigos cuya hija acaba de entrar de lleno en la fase de los porqués.
- Mamá ¿por qué compramos macarrones?
- Porque los comemos
- ¿Por qué comemos macarrones?
- Porque los compramos
- ¿Por qué compramos macarrones?
- Porque los comemos
- ¿Por qué comemos macarrones?
- Porque los compramos
- ...
Y la pobre Sofía, con este bucle, se quedó tan perpleja como si viviera en el mismo País de las Maravillas.
Nota: Me encantan tus portadas del blog!
Estaba yo tambien pasando por una época de admiración y seguimiento de Steve McQueen (ya que a Newman lo tengo más que seguido ya...) y el otro día me compré en una librería, un dvd de esos que tienen de colecciones de periodicos y los venden por 2 o 3€; "El Caso de Thomas Crown" con Steve McQueen como prota, en vez de Pierce Brosnan, al que no acabo de pillarle del tó la gracia.
Venga... sigue instruyendonos... y sorprendiendonos.
Que lisssta la niña
Vaya, vaya. Volvemos a coincidir en temática de entrada y día (y casi en foto) jejeje.
Si el señor Carroll me hace a mi esa pregunta, le tiro la manzana y salgo huyendo ante la imposibilidad de responder jejeje
Un saludo
Alicia es que siempre ha sido muy inteligente en el sentido de la instrospeccion y sus sentidos.
OHHH, se me ha pasado la horaaa, es tardee, es tardeeee, SE ME HACEE TARRRDEEE
ADIOSSS, ADIOSS , ADIOSS.
ME VOY, ME VOY, ME VOY!!
PERO...VOLVERE
FDO: SR.CONEJO.
espero que este arranque de sinceridad no le haga pensar que soy una especie de psicópata obsesivo (cosa no muy lejana de la realidad) pero con esta entrada se ha ganado usted mi corazón de enfermo obsesionado con las novelas de Alicia.
Que sepa usted que a partir de ahora le seguiré de cerca, que me ha gustado mucho su blog.
Me leí las dos novelas, la primera como cuento para niños, y la segunda como un cuento para mayores. El caso es que da igual, puede entretener a ambos, a la humanidad entera, porque es de una fantasía desbordante.
dios mío ¿Vamos a hacer un cocido con Kortajarena?:-)
Me encanta la cabecera "The Towering Inferno", el Coloso. Inspiró a algún malpensado, es lo único malo, pero me encantaba el "sensurround".
Una abraçada.
DEBO leerme este libro cuanto antes.
Bona nit! Es uno de los cuentos más fascinantes que recuerdo de niña...su imaginación desborda.
Lo curioso es que en aquella epoca ya existía el stress, pobre conejo, siempre corriendo como un loco y eso que no tenia que coger ningun autobús para ir a trabajá y con reloj en mano!
Un beso, que se me hace tarde !
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